
Hucha o alcancía es el nombre tradicional de un recipiente para la acumulación y almacenaje de monedas, usado habitualmente por los niños. Las huchas tienen generalmente la forma de cerdos y se hacen a menudo de cerámica o de porcelana. Las huchas se utilizan para inculcar ideas de ahorro y de gasto a los niños; el dinero puede ser insertado fácilmente, pero el cerdo debe ser quebrado o roto (en la mayoría de los casos) para que sea recuperado, forzando al niño a justificar su decisión.
En realidad, cualquier recipiente que disponga de una ranura superior puede hacer las funciones de hucha.
La hucha se ha convertido en un objeto coleccionable, con variaciones que se venden como piezas de arte moderno.
Actualmente, la mayoría de las huchas modernas ofrecen un casquillo en el fondo que se puede quitar para extraer el dinero sin tener que romper el cerdo, pero pierde uno de los sentidos que ésta tiene que es el de conservar el dinero y justificar su extracción para un hecho realmente importante.
Algunas organizaciones benéficas distribuyen huchas solidarias por los comercios como parte de sus campañas de recaudación de fondos.